Qué es y cómo aplicar Design Thinking en su negocio

Design Thinking es una estrategia de creación de productos y servicios innovadores basada ​​en las necesidades reales de los seres humanos y no sólo en el instinto, “la sensación” o “conjeturas”.

Divulgada en todo el mundo por expertos como David M. Kelley, TimBrown y Roger Martin, Design Thinking es una estrategia muy utilizada por empresas de éxito y que aporta excelentes resultados.

Por este motivo, en este artículo le ofrecemos un resumen de sus principales conceptos, las tres etapas de su aplicación y la forma correcta de aplicarlos en su negocio para desarrollar nuevos productos o servicios que atraigan a su público y se conviertan en los más vendidos.

Las 3 etapas de Design Thinking: invente, pruebe, actúe

La comercialización de productos y servicios, frecuentemente carece de bases sólidas, como elementos serios de investigación de mercados, o estudios de mercado para que se tomen las decisiones correctas cuando se lanza algo nuevo para los clientes de su negocio.

En este contexto, el Design Thinking trae una nueva perspectiva sobre cómo hacer frente a este problema de una manera práctica y rápida, siempre sobre la base de las necesidades reales y deseos del consumidor, y especialmente en el comportamiento humano.

Para ello, se divide en tres etapas, las cuales se analizarán con más cuidado a continuación:

1. Invente el futuro: vea a través del comportamiento de las personas

Trate de averiguar lo que quieren los consumidores de su mercado, las cosas que ellos desean que estuvieran disponibles para resolver problemas reales en sus vidas, pero todavía no existen.

Para eso, es necesario sumergirse en sus vidas, analizar su comportamiento y actitudes, y sentir lo que ellos buscan en el mercado, pero no lo encuentran.

Así que no centre su búsqueda en productos o servicios, sino en las necesidades que el comportamiento de las personas indica claramente que no se satisfacen.

2- Haga pruebas reales para comprobar sus ideas

El uso de prototipos es una de las características que diferencian la estrategia de innovación del Design Thinking de otras, menos centradas en cómo las personas interactúan con los productos y servicios que su compañía planea lanzar en el mercado, y que ellos (los consumidores) nunca han visto antes.

Por lo tanto, es fundamental poner a prueba sus ideas para garantizar que su estrategia está en el camino correcto (lo mismo que sus clientes) y que los resultados serán los que usted desea mucho.

Por lo tanto, haga algunos experimentos y vea cómo los consumidores responden a ellos, para que usted pueda ajustar los atributos y características del producto, su precio y, especialmente, su posición en el mercado.

3- ¡Dele vida al nuevo producto o servicio!

Llegó el momento de colocar su producto o servicio innovador en el mercado. Después de todo, para eso se desarrollaron y analizaron cuidadosamente todos estos prototipos, estudios y experimentos.

Para ello, cuando usted defina todo lo que este producto o servicio debe tener y ofrecer a los clientes, determine claramente un plan de acción en el que se debe identificar, entre otras cosas, qué recursos se necesitan para producir, realizar la adecuada distribución, y vender la innovación desarrollada, que abarca:

De esta manera, más que tener una idea acerca de un producto o servicio y llevar al mercado algo que no ha sido probado o planeado, utilice el Design Thinking para ser más asertivo en sus esfuerzos y trabajar con mayor seguridad y confianza en los resultados finales que su empresa debe lograr.

Con la ayuda del Design Thinking es posible descubrir nuevos mercados y más rentables, sin una solución innovadora que, si las etapas anteriores se siguen correctamente, sólo su empresa la ofrecerá, ganando más clientes.

Por último, como vimos, intentar hacer la innovación de productos de una manera poco pragmática y sin pruebas e investigaciones, puede ser un gran error.

Desde la creación del embalaje o logotipos a los rasgos fundamentales de su producto o servicio, todas estas innovaciones en el proceso de desarrollo deben ser probadas cuidadosamente.

De esa forma, su empresa evita arriesgar una elevada inversión para llevar al mercado algo que con el tiempo no será de interés para su público, ni va a satisfacer las necesidades y deseos de los consumidores.

Este artículo lo escribió el equipo de WeDo Logos, la mayor plataforma creativa de América Latina.

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